Los frenos antibloqueo impiden los patinazos y permiten a los conductores dirigir al vehículo durante una situación de emergencia y de necesidad de frenar. El ABS puede ayudar a mejorar la estabilidad del vehículo (evitando los giros), la
capacidad de controlar el volante (dirigiendo el auto a donde el conductor quiere ir) y la capacidad para frenar (la distancia
necesaria para detener el vehículo).
Muchos conductores aprendieron que la forma correcta de parar en una situación de emergencia donde la tracción se perdió y el vehículo se desliza es bombeando los frenos; si bien esto es correcto con los frenos convencionales, con el
ABS es diferente. Todo lo que los conductores deben hacer con los vehículos que tienen ABS es presionar fuerte hacia abajo en el pedal del freno, sostenerlo y girar el volante para salir del peligro. En una situación de emergencia, el ABS bombea los frenos por el conductor y bombea los frenos a una velocidad mucho mayor de lo que podría hacerlo el conductor. Los conductores deberían saber que el quitar la presión estable del pedal del freno y el bombear los frenos desencajará o “apagará” el ABS.
Uno de los beneficios más importantes del ABS es que el conductor puede conducir el vehículo alejándose de los peligros mientras frena. Los conductores no deberían dar un girón o hacer sacudir el vehículo hacia una dirección. Se puede
mantener el control del vehículo conduciendo hacia donde el conductor quiere ir. Los conductores deben fijarse que el
tránsito esté despejado cuando deciden hacia dónde conducir y siempre recordar conducir de regreso al carril original tan
pronto como el peligro haya pasado. Los vehículos pueden estar equipados con dos tipos diferentes de ABS:
Ruedas traseras solamente, en algunos camiones livianos. Previene la rueda trasera de trabarse para que la parte trasera
del vehículo no se resbale de lado. Las ruedas delanteras aun pueden trabarse y el conductor puede perder control del volante si esto sucede. En tal situación, el conductor debe aflojar el pedal de los frenos con bastante presión para ermitir
que las ruedas delanteras rueden nuevamente para mantener control. Cuando el conductor sienta que ha recuperado el control del volante, debe frenar firmemente el pedal de los frenos.
Los conductores pueden determinar si sus vehículos tienen un sistema de frenos antibloqueo buscando un símbolo iluminado de ABS en el tablero de instrumentos justo después de arrancar el motor, consultando el manual o reguntándole a un comerciante de vehículos.
capacidad de controlar el volante (dirigiendo el auto a donde el conductor quiere ir) y la capacidad para frenar (la distancia
necesaria para detener el vehículo).
Muchos conductores aprendieron que la forma correcta de parar en una situación de emergencia donde la tracción se perdió y el vehículo se desliza es bombeando los frenos; si bien esto es correcto con los frenos convencionales, con el
ABS es diferente. Todo lo que los conductores deben hacer con los vehículos que tienen ABS es presionar fuerte hacia abajo en el pedal del freno, sostenerlo y girar el volante para salir del peligro. En una situación de emergencia, el ABS bombea los frenos por el conductor y bombea los frenos a una velocidad mucho mayor de lo que podría hacerlo el conductor. Los conductores deberían saber que el quitar la presión estable del pedal del freno y el bombear los frenos desencajará o “apagará” el ABS.
Uno de los beneficios más importantes del ABS es que el conductor puede conducir el vehículo alejándose de los peligros mientras frena. Los conductores no deberían dar un girón o hacer sacudir el vehículo hacia una dirección. Se puede
mantener el control del vehículo conduciendo hacia donde el conductor quiere ir. Los conductores deben fijarse que el
tránsito esté despejado cuando deciden hacia dónde conducir y siempre recordar conducir de regreso al carril original tan
pronto como el peligro haya pasado. Los vehículos pueden estar equipados con dos tipos diferentes de ABS:
- Cuatro ruedas en vehículos de pasajeros y algunos camiones livianos. Acuérdese siempre de frenar fuerte y mantener control del volante. Es importante mantener presión firme y constante en el pedal de los frenos mientras va parando.
Ruedas traseras solamente, en algunos camiones livianos. Previene la rueda trasera de trabarse para que la parte trasera
del vehículo no se resbale de lado. Las ruedas delanteras aun pueden trabarse y el conductor puede perder control del volante si esto sucede. En tal situación, el conductor debe aflojar el pedal de los frenos con bastante presión para ermitir
que las ruedas delanteras rueden nuevamente para mantener control. Cuando el conductor sienta que ha recuperado el control del volante, debe frenar firmemente el pedal de los frenos.
Los conductores pueden determinar si sus vehículos tienen un sistema de frenos antibloqueo buscando un símbolo iluminado de ABS en el tablero de instrumentos justo después de arrancar el motor, consultando el manual o reguntándole a un comerciante de vehículos.